Hay que tener metas claras y definir el objetivo por el cual se empieza a correr.
Hay que tener claro que el primer rival a vencer somos nosotros mismos.
Hay que disfrutar los entrenos, las competencias.
No importa si se inicia de cero, la constancia es importante para ir mejorando tanto en técnica como en tiempos.
No hay que compararse con atletas que nos superan, quienes pueden tener años entrenando y obviamente por eso tiene mejores resultados, pero lo que podemos hacer es aprender de ellos y tomarlos como referencia de los que queremos alcanzar.